Hoy os hablamos del caso de esta gata que acudió a nuestro centro Perro Bueno - Kansas City con un episodio de disnea (dificultad respiratoria severa).
En la exploración observamos que presentaba un importante derrame pleural, encontrándonos ante un caso de quilotórax. El quilotórax hace mención a la efusión de líquido en el espacio pleural y puede aparecer en perros y gatos a cualquier edad.
Para solucionar la disnea y salvar la vida del gato la presencia del líquido debe ser detectada rápidamente para, a continuación, diagnosticar la causa y tratar el problema que afecta al movimiento del líquido en la cavidad torácica.
Una vez detectada la presencia del derrame, nuestro equipo procedió al drenaje del mismo obteniendo un líquido de aspecto quiloso, mostrando la citología un predominio de linfocitos y realizó al paciente una ecocardiografía. El laboratorio diagnosticó el líquido como exudado crónico con alto contenido en bacterias y células inflamatorias.
Los exudados son consecuencia de un daño mesotelial o endotelial de los vasos, causado por diferentes procesos de tipo inflamatorio, infeccioso, neoplásico o enfermedades concretas como artritis reumatoide. Las bacterias por lo general están presentes en estos procesos.
Con estos resultados, se prescribió a nuestra paciente un adecuado tratamiento con antibióticos que afortunadamente ha logrado su completa recuperación.